lunes, 15 de junio de 2009

De donde vino el Otoño


4 comentarios:

Nancy dijo...

No sé qué me gusta más, si el dibujo o el grabado. Parecieran lo mismo pero no son la misma cosa.
Realmente me deleito siguiendo tus trazos, tratando de imitar la maestría de tus manos. Eres muy buena artista, Chu.
Ya sé que parezco aduladora pero ¿qué otra cosa puedo decirte? Solo te escribo lo primero que llega a mi mente cada vez que vengo a tu blog.
Apapachos

Lunhe dijo...

Hermoso, como siempre.

Natàlia Tàrraco dijo...

Amanece en la isla...bellísimo dibujo, tonos calientes y el verde, el músico,técnica muy delicada, temas con toques oníricos. Te encantan los clown, el circo, eso parece. El dibujo con una niña entrando por la puerta, el suelo en damero, me emocionó, delicioso, me recuerda, de alguna manera, el mío de la niña mirando a la ventana.

Este grabado, como los otros, de trazo finísimo, límpido; dominas la técnica con un estilo sutil, me muestra unos mundos casi cerrados en sí mismo, pero nunca del todo, huye una hoja, se despega una caracola de la cabeza, me gustan mucho.
Felicidades por tu obra, te sigo, Chu. Un bsito, natalí.

Chu dijo...

Dices unas cosas muy bonitas, Nancy, me llegan. Aduladora o no, es una satisfacción grande la que me das cuando leo tus comentarios.
Gracias, por venir a la isla y alegrarme los días.
¡Apapachos!

¡Hola, ?¿! Me alegra que te guste. A ver qué te parece el "verano".
Un beso.

Me encantan los clown, como tú dices, (el circo ya me gusta menos, sobre todo el día a día, jajaja). La niña se llama Maripili. Es curiosa y le gusta descubrir cosas. Su mirada es optimista, porque espera sorprenderse con aquello que descubre. Tu niña, es preciosa. ¿Sabes que estoy pensando en aprender a dibujar con aerógrafo? A ver si encuentro el sítio...
Sí, no me gusta cerrar mis dibujos, que los continúe la imaginación de los que lo vean, lo que les sugiera. Es una forma de que todos participen de la obra.
¿Qué te puedo decir, que tú no sepas?
Un beso, Natalí.