Mamá queso, y sus quesitos
Mamá queso, (que es gallega),
es de rico paladar.
Ha tenido diez quesitos,
todos bien, ninguno mal.

En la tienda de mi abuelo
vienen clientes a comprar.
Todos ven a mamá queso
y todos la quieren llevar.
Pero mi abuelo, (que me quiere),
sé que no la venderá.
Mamá queso y sus quesitos,
¡ay, qué felices están!

¡Qué terrible!
¡Qué desastre!
¡Toda una catástrofe!

Mi abuelito, con las prisas
y las ganas de acostar,
cerró anoche el almacén
en tan malas condiciones,
que llegaron los ratones
y al ver la despensa abierta,
se cenaron la gallega
tres chorizos, seis morcillas,
y de postre, dos jamones.
A falta de otros bienes
y con un mosqueo enorme,
empaquetó a los quesitos
y los vendió por porciones.
