Graciasssss. Chu. Ya sabes lo mucho que me gusta esta "Lucecita de media miel". Me contaste la historia: una idea nueva, diferente al resto de ideas. Y cómo la acogen con extrañeza: "¿dónde va ésta?..." También, la mirada de la "madre" que la siente suya y distinta.
Me ha hecho mucha ilusión tu dedicatoria. Eres una artistaaaa. Y otra, como persona.
Lucecitas de venaro, luciérnagas, puntitos fluorescentes y los grillos cantando. Bellísimo trabajo, delicado, como todos los tuyos, envidio a Mercedes que se lo merece. Luces de veranos en tu corazón, te deseo, compañero de lápices y buriles, natalí.
¡Gracias, Sara, por tu comentario! Me alegra saber que mis dibujos te trasmiten alguna sensación. Un beso.
¡Hola, Nancy! Me encanta verte por la isla, ya lo sabes. Yo sigo "r" que "r", con la Gioconda... jajaja. Apapachos!!
¡Mercedeees! ¿Otra vez volando? ¿Has cerrado el frigorífico antes de echar a volar? Que no nos falten las ideas! Bueno, si algún día me faltan recurriré a tí, que siempre se te ocurren cosas... jajaja. ¡Tú sí que eres una artista como persona! Un verso volador.
Natalí, que la envidia es "mu mala", espántala y mándala lejos que te voy a dedicar la próxima entrada, aunque tengo pensado dar un giro. ¿Te gusta la poesía infantil? Habrá que hacer un "milagro" y volvernos a hacer niños, la próxima, va de peques. Te la dedico con cariño, agradecida por esa luz de verano que me regalas. Un beso, de mujer atrapando la luz del verano.
5 comentarios:
Cada vez que entro a tu blog me llevo algo que me modifica...gracias!!!!!
Qué lindo, me encanta el poema y el título del libro y bueeee, todo en tu blog es lindo.
Graciasssss. Chu. Ya sabes lo mucho que me gusta esta "Lucecita de media miel". Me contaste la historia: una idea nueva, diferente al resto de ideas. Y cómo la acogen con extrañeza: "¿dónde va ésta?..." También, la mirada de la "madre" que la siente suya y distinta.
Me ha hecho mucha ilusión tu dedicatoria. Eres una artistaaaa. Y otra, como persona.
Un abrazo de finde volador (me piro por ahí).
Lucecitas de venaro, luciérnagas, puntitos fluorescentes y los grillos cantando.
Bellísimo trabajo, delicado, como todos los tuyos, envidio a Mercedes que se lo merece.
Luces de veranos en tu corazón, te deseo, compañero de lápices y buriles, natalí.
¡Gracias, Sara, por tu comentario! Me alegra saber que mis dibujos te trasmiten alguna sensación.
Un beso.
¡Hola, Nancy!
Me encanta verte por la isla, ya lo sabes. Yo sigo "r" que "r", con la Gioconda... jajaja.
Apapachos!!
¡Mercedeees! ¿Otra vez volando? ¿Has cerrado el frigorífico antes de echar a volar?
Que no nos falten las ideas! Bueno, si algún día me faltan recurriré a tí, que siempre se te ocurren cosas... jajaja.
¡Tú sí que eres una artista como persona!
Un verso volador.
Natalí, que la envidia es "mu mala", espántala y mándala lejos que te voy a dedicar la próxima entrada, aunque tengo pensado dar un giro. ¿Te gusta la poesía infantil? Habrá que hacer un "milagro" y volvernos a hacer niños, la próxima, va de peques.
Te la dedico con cariño, agradecida por esa luz de verano que me regalas.
Un beso, de mujer atrapando la luz del verano.
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