sábado, 26 de septiembre de 2009

Hortensia

Basado en el libro de Fernando Quiñones, "Las mil noches de Hortensia Romero".

12 comentarios:

Natàlia Tàrraco dijo...

Hortensia en el balcón, el pájaro en la jaula, y ella, quieta.
Esas mujeres y niñas que pintas parecen asomarse, siempre inmóbiles, a nuestros ojos y citarnos a quererlas, natalí

M.A dijo...

Qué original, Chu. Parece un balcón dentro de otro balcón, dentro de otro balcón (porque lo veo en la pantalla-balcón de mi ordenador con marco.
Como diría Aroa: chulíiiiiiisimo.

Nancy dijo...

Qué belleza, Chu, Una composición muy hermosa que me alegra el día.
Apapachos

Natàlia Tàrraco dijo...

Chu, me he quedado atrapada en tus imagenes, otra vez. Los que tocamos lapiz, pincel, plancha et, sabemos lo que significa, de tú a mí.
Maravilla cuando trazas, casi a mano alzada una línea veliente; ejemplo: hombre leyendo.
Encanto en lo infantil a pastel, otro acabado. O en los grabados, más técnicas.
Las pinturas, casi siempre mujeres, mágicas, mirándonos.
Pero, te digo: ¿dónde está esa niña asomando en el quício de la puerta? ella me atrapa, misteriosa, la veo como un reflejo de lo que yo misma expresé.
No es halago, para nada, lo detesto, es emoción sincera de la que sabe lo que es trazar un sueño con las manos. Natalí
P.D. Gracias por mi ogra en esas imagenes.

Chu dijo...

Mercedeeees, holaaa!! jajaja
Aroa y yo ultimamente caminamos de la mano, me lleva a rastras y no me deja ni se deja. Su prima hermana se nos presenta de repente, (niña repelente,le huimos, no nos gusta). Aroa y yo tenemos que sentarnos y mirarnos de frente. Sólo es cuestión de tiempo que lleguemos a entendernos.
Estás mu guapa en tu nueva foto-blog.
Un beso, desde el balcón de mi casa.

Me alegra que te guste, Nancy, y que te haya alegrado el día. (Al pajarillo no se le oye, pero seguro que está cantando).
Un beso y apapachos múltiples.

¡Hola, Natalia! perdona que te haya dejado en último lugar, pero es que te ha tocado en el sorteo de palabras, el texto más largo, ¡lo siento!, es lo que te ha tocado, jajaja.
Que mis niñas-mujeres te sean afectuosas se me manifiesta como una muestra de afecto hacia mí en la parte que de nosotras mismas, las que le damos al lápiz y a los pinceles, dejamos en nuestros personajes. Igual me equivoco contigo, pero no creo, pienso que todos los que creamos algo, también dejamos algo de nosotros mismos en nuestro trabajo y que haya personas que lo aprecien nos enriquece y nos estimula a seguir dándonos en nuestras obras.
Agradezco tus palabras de corazón.
De todos mis dibujos me siento contenta, (satisfecha aunque siempre se puedan mejorar),pero es verdad que algunos de ellos tienen algo especial o que vemos especiales por algo. El dibujo del lector, es uno de estos casos. Limpio, ágil de trazo, que nació porque quiso, un día en que me derroché en miles de puntitos en otro dibujo y mis ojos necesitaron descansar. Aparté el otro, más complicado, y tomé una nueva hoja. Se hizo sólo. Fue un descanso para la vista y para la mano. Para mí, un refresco.
En cuanto a Maripili, esa niña que asoma a la puerta, no sé si me preguntas en plan "filosófico" o en el plano más terrenal de las realidades posibles. Si es lo segundo, la puedes encontrar en el apartado de "mis pinceles", al margen derecho del blog, casi al final. Pincha donde leas "Maripili" y te aparecerá la entrada con la imagen más grande.
Si me preguntas en plan "filosófico", te repondería que Maripili está en cualquier lugar a dónde yo vaya. Aún no he perdido la curiosidad y me gusta dejarme sorprender.
Ha sido un placer "charlar" contigo. Ahora me voy con tu ogra pelirroja a chapotear en el agua y salpicar.
Un beso afectuozizzzzimo.

Natàlia Tàrraco dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Natàlia Tàrraco dijo...

Chu, me lees el pensamiento, siento lo mismo.
En cuanto al dibujo de trazo fino y seguro, del "lector" como otros tuyos, me fascina, es dificil conseguir esa frescura, me evoca, con otro estilo, los dibujos de trazo de Chillida, felicitaciones.
La niña es otro asunto, me recuerda la que yo dibujé, expresa lo mismo pero de otra manera, lógico. Si quieres te la envio.
¿Puedo tomar la tuya si la encuentro? Que te siente bien el bañito con mi "ogra", bsito, natalí

XoseAntón dijo...

Hola, Chu, siempre es un placer subirse al barquito y acercarse a este continente de bellas imágenes.

Si algún día dibujas un despertador encerrado entre unos barrotes, mándamelo. Que que de aquí en adelante, en mi prejubilación, me gustaría tenerlo encerrado a él como él me ha tenido a mí hasta ahora.

Bikiños

Natàlia Tàrraco dijo...

Chu de mi alma, encontré a Maripili, ¿puedo llevarla de visita a mi blog? es un sueño.
NO SÉ DÓNDE ENVIARTE A MI NIÑA,
INFÓRMAME, PORFA.
Bsito, natalí

Chu dijo...

Xoxe, qué alegría verte de nuevo por la isla!! Tanta, que te dedico mi próxima entrada. ¡Va por tí!
Me encanta tu barquito, que te trae de visita.
Debes ser un hombre tranquilo, yo en tu lugar, le habría "atizao" con el martillo, (al reloj, me refiero), jajaja.
Gracias por venir y por dejarme tu comentario, siempre animándome.
Un beso de vela.

Natalia, estoy deseando recibir esa niña tuya. Te he puesto un correito, dime si te ha llegado. Puedes enviármela a esa dirección, ¡date prisa que estoy impaciente!
Puedes irte con Maripili de paseo por tu blog, o por el parque, donde más te apetezca, ella no da guerra... todo lo más, te pedirá que le cuentes un cuento, jajaja
Un beso de mujer contenta.

Anónimo dijo...

Leí este libro hace un año, o más, y la verdad es que me ha hecho gracia encontrarlo en tu blog, en forma plástica, gracias.

Chu dijo...

¡Hola, Juanma!!
¡Qué alegría verte por aquí!
Espero que te rieras y disfrutaras tanto con el libro como yo.
Un beso